The Student News Site of The University of Texas at El Paso

Minero Magazine

The Student News Site of The University of Texas at El Paso

Minero Magazine

The Student News Site of The University of Texas at El Paso

Minero Magazine

Vida Estudiantil 2020

Vida+Estudiantil+2020

La pandemia de COVID-19 afecta la vida de estudiantes que trabajan en los campus de sus escuelas

El año académico 2020-2021 comenzó en medio de una pandemia causada por el COVID-19, uno de los desafíos que enfrentan muchas universidades en el país es como administrar sus programas de trabajo y estudio para estudiantes.

Las pasantías y las oportunidades laborales se han cancelado debido a las restricciones que se han implementado para evitar el contagio de COVID-19. La incertidumbre sobre lo que puede suceder después de la graduación aumenta para lxs estudiantes que están próximos a graduarse.

Las ceremonias de graduación se han realizado vía Zoom, ahora lxs estudiantes se encuentran en el limbo y con ansiedad respecto al como sustentar sus estudios y lo que les espera al terminar sus estudios universitarios.

Tal es el caso de la estudiante de emprendimiento Evelyn Martínez, 20 años, quien toma sus clases en línea en la Universidad de Texas en El Paso (UTEP) y trabaja dentro del campus en Union Services como asistente de programación.

Evelyn Martínez. Foto por María Salette Ontiveros.

“En lo personal me ha ido muy bien gracias a Dios, porque desde que empezamos a trabajar desde casa en marzo, nos siguieron pagando nuestras 19 horas a todxs y nos ayudaron mucho a mejorar nuestras habilidades profesionales”, Martínez dice.

Lxs estudiantes que dependen de trabajos de medio tiempo en los campus universitarios para pagar por sus estudios se han visto afectados y con opciones financieras limitadas para el ciclo escolar 2020-2021.

“Hay algunxs que, si les afecta, lxs que tienen una posición distinta a la mía y que estudian más de lo que trabajan, entonces si le dan como 12 horas a la semana y pues están batallando un poco más”, Martínez dice.

Stephanie Chávez, 23 años, estudiante de periodismo multimedia, trabaja como supervisora del departamento de Fitness dentro de UTEP mejor conocido como el REC, cuenta como desde que comenzaron a trabajar de casa se les actualizo en el cómo sería volver a trabajar al campus en otoño 2020.

“Mientras que estuvimos trabajando desde casa estuvimos recibiendo correos de actualizaciones de como seria trabajar en el campus durante el semestre”, Chávez dice. “Antes la verdad llegaba a mi trabajo y me iba directo a la oficina, ahora tengo que llegar y antes de ir a la oficina, lavar mis manos, luego ya voy a la oficina, y debo estarme lavando mis manos constantemente, como, por ejemplo, cuando voy al baño, pues debo lavarme las manos antes de ir al baño, y después de ir al baño. También yo me encargo de desinfectar lo que vaya a usar un instructor antes de que lo use y después de que lo use.”

Según el departamento de Trabajo de Estudiantes (en inglés: Student Employment) de la División de Asuntos Estudiantiles de UTEP, más de 2,000 estudiantes trabajan en todo el campus. Desde trabajo en la biblioteca, en los laboratorios, las oficinas y los restaurantes, estos estudiantes mantienen UTEP en funcionamiento.

En el ciclo escolar 2019-2020, el 18% de todas las familias en Estados Unidos dependieron de programas de trabajo y estudio para pagar la universidad, y el monto promedio de ayuda de lxs estudiantes aportaron entre esas familias fue de $1,847, según el estudio “How America Pays for College” de Sallie Mae.

De acuerdo con el artículo, “U.S. unemployment rate” publicado en statista.com, millones de Americanos permanecen desempleados o trabajando con salarios reducidos por consecuencias de los impactos económicos por la pandemia del COVID-19, las familias podrían encontrar particularmente difícil poder pagar los costos de la universidad del ciclo escolar 2020- 2021.

“Antes la verdad llegaba a mi trabajo
y me iba directo a la oficina, ahora tengo que llegar y antes de ir a la oficina, lavar mis manos, luego ya voy a la oficina,
y debo estarme lavando mis manos constantemente.” Stephanie Chávez

Algunas familias no tienen los medios para pagar los costos de la universidad este año. Sin embargo, quieren que sus hijxs continúen estudiando, han tenido que pedir préstamos al gobierno, causando un aumento en las solicitudes de préstamos al gobierno debido al fuerte impacto económico de la pandemia.

Tal es el caso de Oscar Félix, padre de familia que tiene dos hijxs cursando estudios de nivel superior, su hija asiste a El Paso Community College (EPCC) y su hijo a UTEP.

“Debido a que a mí me descansaron de mi trabajo por la pandemia y me disminuyeron la paga quincenal y mi esposa no consigue trabajo, nos vimos obligados de pedir un préstamo al gobierno para poder pagar el ciclo escolar a Tania en su último año en EPCC y a Bruno en su primer año en UTEP porque pues con el sueldo que tengo yo no nos alcanza ni para tener a uno de ellos estudiando y mi esposa y yo no queremos que dejen de estudiar y a base de esto pues nos preocupa un poco que esto nomás no mejore”, Félix dice.

El 48% de familias en Estados Unidos pidieron prestamos pagando únicamente el 21% de costos de la universidad. Y el 58% de las familias en Estados Unidos usaron becas, haciéndolo el principal medio de pago para la universidad.

Los ingresos del programa de trabajo y estudio son una parte esencial de la ayuda financiera que hace posible la opción universitaria para muchos estudiantes, tal es el caso de Oscar Zúñiga, estudiante de psicología que tiene planes de graduarse en el semestre de otoño del 2020.

“Me siento tremendamente emocionado de graduarme, pero al
mismo tiempo me siento triste porque no podre graduarme asistiendo
a UTEP a las clases presenciales, y como estudiante el tener clases
en línea me ha ayudado a trabajar a mi ritmo, pero también me limito
en interactuar con lxs profesxres y con lxs compañerxs”, Zúñiga dice.

La universidad opero este otoño a un 5% de su capacidad y planea operar el semestre de primavera ofreciendo clases en línea, así como también clases hibridas, pero con un límite de asistentes por clase y con las medidas del distanciamiento social.

Martínez comenta como se disminuyó el personal en su lugar de trabajo dentro de las instalaciones de la universidad.

“Antes de la pandemia éramos 110 trabajadores en el REC y ahorita estamos solamente 62 trabajando ahí”, Martínez dice.

Así como las clases, la universidad ha optado por incluir el trabajo y estudio federal en los paquetes de ayuda financiera de lxs estudiantes, a menudo con énfasis en las opciones para trabajar de manera segura, como trabajos remotos o presenciales que permitan incluir las medidas de seguridad requeridas. Pero incluso esxs estudiantes pueden encontrarse compitiendo para obtener uno de los trabajos disponibles limitados en el campus este año y correr los riesgos que pueden afectar su salud y su bolsillo.

En marzo 27, 2020, el presidente de los Estados Unidos Donald Trump, firmo el Coronavirus Aid, Relief, and Economic Security Act, también conocido como CARES Act(H.R. 748), que provee fondos de emergencia a organizaciones e individuos afectados por la pandemia. En el semestre de primavera y otoño se otorgó esta ayuda por segunda ocasión a estudiantes de UTEP que fueron elegibles para recibirla.

La elegibilidad para recibir esta beca del gobierno a través de UTEP tenía como requisitos que el estudiante debió de haber estado inscrito en el semestre de primavera 2020, no debe de haber estado inscrito en un programa exclusivamente de clases en línea antes del 13 de marzo de 2020. Debió haber completado y enviado con éxito una solicitud gratuita de ayuda federal para estudiantes (FAFSA) 2019-2020 a UTEP.

“La ley CARES Act, porque son dólares federales, el estudiante tiene que ser ciudadano americano, y deben de tener un archivo FAFSA, que es lo que utilizamos para determinar en donde el estudiante necesita ayuda financiera. El estudiante también debe de ir en línea y contestar una aplicación y certificar que necesitaban el dinero a causa del COVID-19, que ellos necesitaran el dinero por que perdieron su empleo o están atrasados en la renta o algún gasto relacionado con el COVID-19 que debieran cubrir”, Gary Edens, vice- presidente de asuntos estudiantiles dice.

“El título IV es un formulario FAFSA, ese es el Pell Grant de préstamos estudiantiles, la ayuda del título IV es todo el dinero federal que tenemos para apoyar a lxs estudiantes a través del sistema de ayuda financiera”, Edens dice.

De acuerdo con la oficina de ayuda financiera para estudiantes de UTEP, el total de estudiantes que recibieron la ayuda económica fueron 11,284 estudiantes a la fecha del 11 de septiembre de 2020.

“Una vez que nos quedamos sin dinero tuvimos que cerrar el programa, así que fue una lástima”, Edens dice.

Debido a los requisitos y la demanda de aplicaciones del CARES ACT no todos lxs estudiantes de UTEP obtuvieron la ayuda económica.

“Por supuesto no todxs nuestros estudiantes fueron elegibles porque tenemos estudiantes que no son ciudadanos estadounidenses o no completaron FAFSA, por lo que para esos estudiantes si tuvimos un paquete de dinero mucho más pequeño llamado fondo de emergencia que se creó con dinero donado a UTEP. La gente estaba donando un par de miles de dólares en ese fondo y pudimos premiar a algunxs estudiantes internacionales y algunas personas que no pudieron obtener los fondos del CARES Act”, Edens dice.

“Entonces, desafortunadamente, eso se limita a la cantidad de donaciones que tenemos, pero pudimos apoyar a algunos estudiantes que no eran elegibles para el CARES Act, y a medida que obtengamos más donaciones, continuaremos respondiendo a ese fondo para ayudar a más estudiantes.”

Para estudiantes que recibieron el dinero a traves de el CARES Act esto tuvo un impacto significativo para continuar con sus estudios.

“Me siento muy agradecido con UTEP por haber brindado esa ayuda por segunda vez y en la manera en la que me ayudo el CARES Act fue que pude comprar mis libros para mis clases, comprar provisiones, realmente espero que haya ayudado a otrxs estudiantes tanto como me ayudo a mí, ya sea si lo recibieron por primera o segunda vez”, Zúñiga dice.

Conforme la pandemia va avanzando también lxs estudiantes han compartido algunos miedos e incertidumbres que han venido con la suspensión de clases presenciales, con el hecho de que el campus continúe vacío y no saber que puede pasar con sus trabajos.

Así también como las clases en línea, los lugares de trabajo han cambiado limitando a lxs trabajadxres a tener un horario estricto para evitar que se relacionen con otrxs colegas en el campus muy de cerca o que se encuentren en el mismo espacio cerrado.

De la misma forma lxs estudiantes próximos a graduarse y lxs trabajadxres en el campus no saben qué consecuencias pueda reflejar esto en su futuro.

“Si he estado ahorrando dinero por si llegara el momento en el que no nos estuvieran pagando, porque, pues si esto va para largo, quizá en algún punto nos van a dejar de pagar ya que no vamos a estar yendo y referente a la escuela me preocupa mucho que no regresemos el próximo semestre, ya que yo me graduó en mayo y si sería muy feo que estuviera igual el próximo semestre”, Martínez dice.

Reportaje y fotografías por María Salette Ontiveros

In Brief

by Brandy Ruiz

The 2020-2021 school year was disrupted by the global COVID-19 pandemic, causing many universities in the country to change the way they conducted their work-study programs for students.

Many opportunities and jobs were canceled due to country- wide restrictions that were implemented. Additionally, students who were expected to graduate in 2020 had their graduations through Zoom and face-to-face courses for the Fall semester went completely online.

Evelyn Martinez, 20, entre- preneurship major is one of the many students forced to take online classes at the University of Texas at El Paso (UTEP) and she also worked on campus for Union Services as a program assistant.

“Personally, I’ve done very well thank God, because we started working from home in March. They (UTEP) continued to pay us all 19 hours and helped us a lot to improve our professional skills,” Martinez says.

Students who depended on part- time jobs on campus to pay their studies faced limited financial options for the 2020-2021 school year.

“There are some that, if it affects them, those who have a different position than mine and who study more than they work, then they give them about 12 hours a week and they struggle a little bit more,” Martinez says.

According to UTEP’s Student Employment Department, more than 2,000 students are employed through on-campus jobs. From working in the library, the recreational center, laboratories, these students keep UTEP running.

According to a report by statista.com on the U.S. unemployment rate, millions of Americans find themselves unemployed or working on reduced salaries because of the impact of the COVID-19 pandemic. Families might find it particularly difficult to afford college costs for the 2020-2021 school year.

Such is the case of Oscar Felix, father of a family that has two children attending college, his daughter attends El Paso Community College (EPCC), and his son attends UTEP.

“Because I was laid off from work because of the pandemic and my fortnightly pay was reduced and my wife cannot get work, we were forced to borrow from the government so that I could pay the school year for Tania in her last year at EPCC and Bruno in his first year at UTEP. With the salary I have, I do not have enough to even have one of them studying.

So, we are a little worried if things do not improve,” Felix says.

On March 27, 2020, the Coronavirus Aid, Relief, and Economic Security (CARES) Act was established to supply financial relief to business and people who were affected by the pandemic. But, because of the requirements needed to apply, many students from UTEP did not qualify for the financial aid.

“Students have to be an American citizen and they must have a FASFA file, which is what we use to determine where the student needs financial assistance. The student must also go online and answer an application and certify that they needed money due to COVID-19, that they needed money because they lost their job or are behind in rent or some COVID-19 related expense,” Gary Edens, vice- president of student affairs says.

Because of the uncertainty of the pandemic, students fear for the future.

“I am saving money in case the time comes where they stop paying us, because if this goes for long, maybe at some point, they will stop paying us since we are not actually going to school. I’m very worried that we won’t come back next semester. I graduate in May and it would be very ugly if things are still the same then,” Martinez says.

Leave a Comment
More to Discover

Comments (0)

All Minero Magazine Picks Reader Picks Sort: Newest

Your email address will not be published. Required fields are marked *